Estado de la pandemia COVID-19 en el condado de San Miguel
3 de abril de 2020
Por: Dra. Sharon Grundy, médico oficial del condado
Es difícil creer que este virus entró en nuestro estado hace menos de un mes. Han pasado tantas cosas tan rápidas, y sin embargo todavía me despierto cada mañana casi en un estado de incredulidad.
En los últimos días pasamos de un caso positivo de COVID-19 en nuestro condado a nuevo, y todavía tenemos docenas más pruebas de hisopo pendientes.
También estamos empezando a recibir resultados de nuestros análisis de sangre COVID-19. Con menos del 20% de la primera ronda de resultados de la prueba recibida, es suficiente saber que el coronavirus ha estado aquí, está aquí y vendrán más.
Al observar nuestros primeros datos, viajar es el factor de riesgo número uno para contraer el virus, seguido por un contacto cercano con los miembros de la comunidad y los turistas.
Cerrando nuestra área de esquí, ayudamos a disminuir la afluencia de los viajeros internacionales a nuestra región. Cerrando las escuelas ayudó a disminuir la propagación entre nuestros niños.
Inmediatamente después de esos cierres, llegaron nuestras órdenes de salud pública que limitaban las reuniones grupales, restringiendo a los restaurantes a solamente comida para llevar y entregar, y prohibían los servicios no esenciales, y el refugio en el lugar y las órdenes de distancia social. Sé que muchos en nuestra comunidad pensaron que estas medidas eran extremas, una reacción exagerada a una amenaza lejana.
Entonce yo creí, y tengo confirmación ahora, que estas acciones fueron esenciales y nos ayudaron a contener lo que podría haber producido casos aún más positivos.
Recientemente aprendimos que la mayoría de nuestros individuos con resultados positivos y limite de análisis de sangre si siguiera tenian ningun síntomas, lo que confirma que el virus se propaga de personas que nunca saben que están enfermas. El virus parece hacer como un pasajero silencioso. Estamos viendo lo que está haciendo en Nueva York, Nueva Orleans, y el camino de destrucción que deja.
Hay demasiado riesgo. Nuestras instalaciones regionales de atención médica se maximizarán. Si no hacemos nuestra parte, fracasaremos. Podríamos ver más de una docena de pacientes críticos por día y más muertes en un mes de lo que normalmente vemos durante todo el año. No podemos tolerar una pérdida tan devastadora.
Estoy trabajando todos los días junto a nuestra Directora de Salud Pública, Grace Franklin. Confiamos en que la nueva extensión de nuestras órdenes de salud pública es crítica para continuar luchando contra esta pandemia y su amenaza muy real para nuestra comunidad.
Pero al final del día, mucho de esto depende de usted. Tu comportamiento importa. Su comportamiento es la mejor defensa contra COVID-19.
Cuando las cosas están fuera de control, anhelamos algo que podamos controlar. Podemos controlar nuestros comportamientos. Y te estamos armando con las mejores armas para defenderte a ti y a nuestra comunidad de esta enfermedad.
QUÉDESE EN CASA. Seriamente. Pero todavía se puede disfrutar caminando con miembros de la familia o un pocos amigos.
Limite severamente cualquier reunión social a unas pocas personas, preferiblemente afuera.
En la medida en que esté fuera del hogar o con personas afuera de su hogar, asegúrese de mantener distancia físico. Considere usar un pañuelo o protector facial, lavándolo con frecuencia.
Y recuerde:
lávese las manos, sí, aún lávese las manos con frecuencia y bien con agua y jabón.
No te toques la cara. Suena tonto, pero esa disciplina es una gran defensa.
Desinfecta tus superficies.
Lave su ropa y báñese cuando regrese de un lugar público.
Evite que sus hijos jueguen con grupos de otros niños.
Y si se enferma, quédese en casa y aísle de los miembros del hogar que no están enfermos.
Su comportamiento, nuestro comportamiento colectivo es nuestra mejor defensa para evitar que esta enfermedad destruya nuestro sustento de vida y deje su huella indeleble en nuestra comunidad.
Por favor, te ruego que haga su parte.
Dra. Sharon Grundy,
Oficial Médico del Condado de San Miguel